martes, 21 de julio de 2009

Etapa 11. Santa Irene - Santiago

Hoy ha sido de nuevo repetitivo nuestro comienzo de Etapa: a las 6 salida, a las 8 barritas ...... ya se mezcla un deseo por llegar y volver a casa con todos los recuerdos de los días anteriores.

El trayecto hasta que llegas hasta la zona del aeropuerto, pasa entre eucaliptos, y contínuos entrar y salir de carreteras; está muy mal señalizado el Camino en este tramo, si avanzas es más por intuición que por los hitos, que brillan por su ausencia.

Después de unos 8 ó 9 kilómetros comienzas tomar desvíos, por el aeropuerto, por las autopistas, que realmente hacen que esta última parte sea de los más poco vistosa que uno pueda encontrarse.

De todas formas y como decía antes, empiezan a agolparse recuerdos, el páramo leonés, el descenso del Acebo, el cansancio que algunas veces te hizo pensar en abandonar, las largas caminatas, el echar de menos tú casa y tú familia, el cansancio y dolor de todos los músculos de las piernas, las vacas, las moscas, los ronquidos, los niños de 8 años que iban con sus padres haciendo el Camino, las que hacían lo han hecho en taxi ..... son muchas vivencias en tan pocos días.

Las piernas van prácticamente sólas, no nececitas ningún esfuerzo para que te lleven hacia adelante, se han acostumbrado con el paso de los días a llevarte.

Te cruzas con gente que ha estado contigo durante este tiempo, los saludas de nuevo y te despides, seguramente nunca vuelvas a verlos, pero tu deseo es culminar esta etapa que supone el llegar al final y la vuelta a tu casa.

Hemos atravesado O Pino con todos los albergues completos y con un polideportivo lleno de gente, no me atrevo a calcular cuanta gente podría haber allí pero estaba el pabellón lleno de colchones en el suelo con gente sobre ellos y un grupo de voluntarios con el desayuno preparado para ellos, esto es lo bonito del Camino; hay gente que te da sin pedir nada a cambio, todo el mundo se vuelve solidario con los demás porque sabe cuanto esfuerzo hay que realizar para poder hacer el Camino.

Hacia las 10 de la mañana hemos llegado a Monte O Gozo, donde hay un gran monumento en conmemoración a la visita que Juan Pablo II realizó a ese lugar; desde allí se podía ver Santiago de Compostela: faltaba muy poco para llegar.

Tras una dura bajada, paso de rotondas, puentes, autovías, calles llenas de gente hacia su trabajo o quehaceres cotidianos, hemos entrado en el Centro Histórico de Santiago, los dolores, el cansancio, las duras jornadas de días atrás parecían no pesar, toda la marea de gente deseaba llegar a la Plaza del Obradoiro para poder entrar a la Catedral y cumplir su objetivo.

Cuando la gente llega a esa Plaza todo son abrazos, saludos, despedidas a los compañeros del Camino, entras a la Catedral, abrazas al Apóstol, vistas la oficina del Peregrino para que te pongan el último sello en la Credencia y te entreguen la Compostela y a las 12:00 la misa del Peregrino.

Palabras de alabanza durante la homilía por parte del sacerdote a los peregrinos, salida de la catedral y reencuentro y despedida de otros peregrinos que te has ido encontrando por el Camino; seguramente no los vuelvas a ver nunca más, pero ellos hicieron el Camino contigo.

Después encontrar el albergue, ducha y unas tazas de ribeiro para aplacar la sed y el hambre.

Hoy se acaba nuestro Camino que ha durado 11 días y 311 kilómetros desde León a Santiago; esta ha sido mi vivencia, pero realmente para saber lo que es hay que vivirlo: nadie te lo puede contar.

Hasta mañana

lunes, 20 de julio de 2009

Etapa 10. Melide - Santa Irene

Como prácticamente todos los días comenzamos nuestra jornada a las 6 de la mañana, desde Melide.


En este punto se unen otros Caminos que van hacia Santiago, el camino que viene desde el norte desde Ribadeo, la confluencia de peregrinos es cada vez mayor, aunque nos han comentado que el grueso de peregrinos viene detrás para hacer coincidir la llegada con el día de Santiago; si ayer estaba todo completo en Melide, no me quiero imaginar lo que será dentro de un par de días.


La etapa sigue siendo como las anteriores, con constantes subidas y bajadas, algunas de ellas con importantes pendientes; el paisaje que hace unos días nos parecía precioso, con el verdor de los prados, el camino cubierto totalmente por arboledas, hoy ya se empezaba a hacer monótono; a excepción de un cambio muy importante, dejamos el olor a vaca y lo cambiamos por un profundo olor a eucalipto, menudo cambio.


Los pueblecitos que atravesamos, de dos o tres casas , ya nos parecn todos iguales, la misma tipología: casita de piedra con cubierta de pizarra y hórreo.


Hemos atravesado Arzúa sobre las 8:45, después de dejar atrás Santiago de Bonte, Castañeda, Ribadiso, ....


A las 10:30 hemos parado a desayunar en un pueblo que se llama Calle, y aquí ha venido la anécdota: los bocadillos eran de un tamaño descomunal, con uno podríamos haber comido los tres sin ningún problema; un pedazo de tortilla de patatas con media hogaza de pan; haciendo un esfuerzo nos la hemos comido, y menos mal que estábamos a menos de 7 km.


Nos hemos cruzado con una chavala en sentido contrario al nuestro y le hemos llamado la atención de que iba al revés, pero nos ha indicado que no ..... ella ya había llegado a Santiago y ahora volvía a ROMA ANDANDO, aquí te das cuenta que no estás tan loco.


A las 1 del mediodía hemos llegado a nuestro destino, Santa Irene, después de 31 kilómetros y ya los pies andando por su proia inercia.


Después de ducharnos, hemos vuelto 1 km sobre nuestros pasos para comer porque donde estamos sólo está el albergue, que por cierto está bien.


Siesta para reponer, colada y un rato de relax.


Cenaremos pronto porque a las diez cierran el albergue y hay que volver a subir y bajar. Han cruzado por delante de nosotros un par de grupos de 10 ó 15 peregrinos que no encuentran donde dormir y que tendrán que hacerlo al raso, porque hasta Monte O Gozo eztá todo ocupado y está a 15 km de aquí.


Mañana será nuestra última etapa para llegar a Santiago, queremos salir a la hora de todos los días, aunque sólo nos queden 21 kilómetros.

La foto que nos acompaña hoy es de una fuente que ha recuperado el Programa de Escuelas Taller en la provincia, durante todo el Camino hemos visto todo lo que el Programa de ET y Casas de Oficios ha ido recuperando; en otras comunidades deberían de aprender en lugar de machacarlo.


Hasta mañana pues con muchas ganas de llegar a casa

domingo, 19 de julio de 2009

Etapa 9. Gonzar - Melide

Esta noche pasada hemos podido descansar sin los típicos ronquidos de los peregrinos; en la habitación para unos 18 - 20 peregrinos estábamos sólo 5 personas y eso se nota.

Hoy ha sido una jornada totalmente atípica, pues desde que comenzamos en Gonzar a las 6 de la mañana, nos ha acompañado un niebla espesa y húmeda que impedía ver más allá de nuestros pasos, por lo que no sabemos que paisaje teníamos a nuestro alrededor.


Lo único bueno que nos encontramos en esta primera parte de la etapa era el piso del Camino, sencillamente genial, una pista de tierra compactada que nuestros pies han agradecido enormemente.

Hemos ido atravesando agrupaciones de casas semiabandonadas como Ventas de Narón, Laneiros, Ligonde y Lastedo; todas ellas plagadas de hórreos como el que hoy ilustra esta jornada.

A las 9:30 habíamos llegado a Palas de Rei, donde hemos parado a desayunar; no hemos parado a nada más, pues tampoco queríamos que nos pasara lo de la jornada anterior y llegar demasiado tarde y cansados al punto de destino que teníamos previsto fuera Melide.

Cuando salimos de Palas de Rei la niebla había desaparecido prácticamente y ya podíamos ver algo más alrededor, eucaliptos, pinos, vacas ....... muchas vacas, demasiadas diría yo.

La etapa ha sido un contínuo subir y bajar tipo rompepiernas como casi todas las anteriores; mientras seguíamos caminando, nuestro equipo logístico en casa intentaba buscarnos sitio donde pasar la noche en Melide, porque nos comentaron ayer que el albergue de Melide era el peor del Camino y no había ninguno privado. Pero tampoco encontraban nada desde Úbeda para nosotros.

Continuamos nuestro camino atravesando pequeños pueblecitos como Casanova y Laboreiro donde paramos a tomar un refresco, nos quedaban sólo 6 kilómetros para completar los 31 que tenían en esta etapa, un par de kilómetros antes de Laboreiro dejamos la provincia de Lugo para adentrarnos en Coruña

A las 13:30 llegamos a Melide y pasamos delante de la pulpería que todo el mundo recomienda para comer, ya la teníamos localizada para después; ahora tocaba encontrar sitio y ducharse.

Siguiendo el Camino por dentro de Melide fuimos a dar con el Albergue municipal que no tiene mala pinta por fuera y ante la insistencia de uno de los componentes del grupo nos albergamos; está viejo, instalaciones más que pésimas y hacinados, en pequeñas habitaciones de 15 metros cuadrados hay 8 personas en 4 literas, duchas sin puertas ......

Tardamos más de una hora en poder entrar y ya el hambre era canina, nos duchamos y salimos corriendo a la pulpería con miedo a que cerraran y nos quedáramos sin nuestra recompensa.

Llegamos a la pulpería, que es una sala inmensa llena de mesas corridas, donde la gente con su plato de madera cubierto de pulpo se sienta para degustarlo: quizás en otro tiempo fuera la mejor pulpería de la zona, pero sin miedo a equivocarme en casa lo hacemos mucho mejor.

Después de comer lo de siempre siestecita reparadora, lavado de la ropa con la que hemos andado por la mañana y paseo por el pueblo para ver sus edificios, como en el albergue no hay conexión a internet con el móvil, he tenido que adelantar el post de hoy un poquito.

Sólo nos quedan un par de jornada para llegar a Santiago y de nuevo a casa. Estamos barajando la posiblidad de hacer mañana otra etapa de 30 kilómetros hasta Santa Irene y dejar los 21 restantes para el martes, todo depende de los albergues que encontremos en el Camino.

Ya falta muy poquito para volver a casa; hasta mañana

sábado, 18 de julio de 2009

Etapa 8. Sarria - Gonzar

Esta mañana hemos vuelto a nuestra rutina; a las 5:30 levantarse y a las 6 caminando.

Comenzábamos en el kilómetro 111,5 a Santiago y en esas andábamos cuando al pasar por delante del monasterio de la Magdalena en Sarria nos despistamos y no seguimos la ruta; nos costó dar un buen rodeo para volver a cojer el Camino y ese es un precio muy caria estas alturas.

Una vez cogido el sendero, tuvimos que atravesar las vías del tren, es algo peligroso porque estas en una curva con una visibilidad nula.

Nos encontramos con un grupo de scouts que rápidamente dejamos atrás aprovechando que estábamos en una zona de subida.

La mañana era muy húmeda y te calaba hasta los huesos. Una vez terminado nuestro ascenso, nos topamos comuna zona boscosa, con pequeños arroyos cruzando el sendero por el que andábamos; enestos tramos el firme está bastante mejor que en jornadas anteriores.

La bruma nos seguía acompañando mientras pasábamos por pequeñas aldeas de 4 ó 5casitas, todas ellas dedicadas a la cría de vacas; nos hemos cruzado con un par de rebaños que han pasado junto a nosotros y son animales que impresonan por el tamaño que tienen.

Uno de los objetivos previstos era superar el kilómetro 100, que un poco psicológico, le quitas una cifra y parece que te quedabastante menos, lo hemos superado y nos hemos hecho la foto de rigor, que es con la que se acompaña el post de hoy.

Hemos pasado Barbadelo, Rente, Lavandeira, Brea, Ferreiros donde hemos parado a desayunar, temiendo no encontrar nada hasta Portomarín, al que hemos llegado a las 11:00 del mediodía, después de atravesar el embalse de Belesar, bajo el que se encuentra el Portomarín antiguo; una parada en el pueblo que se construyó en el año 1960 visita a la iglesia románica de San Nicolás que fué traslado piedra a piedra junto con algún que otro edificio, antes de quedar sepultado bajo las aguas del embalse.

A las 12:00 cogíamos dirección hasta nuestro destino, Gonzar.

Aun estando el piso llano, estando ya el sol en su plenitud y picando subida, junto a los kilómetros andados, los 7 kilómetros hasta Gonzar se nos hicieron cuesta arriba, nunca mejor dicho pues teníamos que salir del valle.

A las 2 de la tarde terminábamos la etapa de hoy tras 30 kilómetros recorridos y pensando que sólo nos quedan 82 y que pronto estaremos en casa.

El pueblo es tan pequeño que hemos estado a punto de pasárnoslo: cinco casas, dos de ellas en ruina, un bar, dos albergues, una pequeña iglesia de traza románica con su cementerio y poco más; bueno si un par de vaquerías dentro del pueblo que nos han tenido suministrados de moscas durante la cena.

Mañana vamos a intentar llegar a Melide, aunque no sabemos como reaccionarán nuestras fuerzas, son casi 32 kilómetros y las piernas pesan cada día más.

Voy a descansar un rato que dentro de poco sonará el despertador anunciando una nueva jornada.

Ya hay muchas ganas de volver a casa.


La conexión es pésima cuando pueda escribo

viernes, 17 de julio de 2009

Etapa 7. Triacastela - Sarria

Hoy a sido un día algo atípico en nuestro Camino.

Teníamos previsto levantarnos media hora más tarde para intentar recuperar un poco del cansancio que vamos acumulando; pero nuestra sorpresa fué que llovía con mucha intensidad, por lo que decidimos volver a la cama de nuevo para seguir descansando. Toda la noche estuvo lloviendo, segun nos comentaron después.

Sobre las 6:45 horas nos levantamos porque había parado prácticamente de llover; después del aseo nos pusimos en marcha a las 7:15.

Habíamos decidido que la etapa de hoy sería algo menos dura que las anteriores, el Camino hace mella y hay que ir recuperando. Desde Tricastela hasta Samos fuimos por la carretera porque no sabíamos como estaría el Camino después de la lluvia, temíamos que si el piso era de las características del día anterior acabaríamos muy mal con el calzado que llevábamos que no está preparado para un Camino embarrado.

No se si lo habré comentado anteriormente pero es un auténtico lujo y placer ir caminando entre las arboledas, escuchando los pájaros como sonido de fondo, con el frescor de la mañana.

Pasamos Renche y a las 9:30 estábamos en Samos. Después del desayuno nos acercamos al monasterio para verlo; tuvimos que esperar a que lo abrieran y que nos hicieran una visita guiada.

El monasterio es gigantesco, hay una parte que las está restaurando la Escuela Taller y que estará destinada a Museo, una zona donde siguen viviendo los monjes Benedictinos, otra zona destinada a albergue de peregrinos y otra para personas que realizan retiros espirituales con los monjes del monasterio; este monasterio es el símbolo cultural de Galicia. Nos mostraron los claustros del monasterio, la capilla y la iglesia, fué una visita guiada para los tres compañeros del Camino, todo un lujo.

A la salida de la visita, tuvimos una sorpresa desagradable: la lluvia. Nos colocamos nuestros ponchos y a seguir Camino. Habíamos hecho la mitad de la jornada y por las nubes veíamos que el agua nos acompañaría nuestra otra mitad.

El caminar con agua hace que vayas bastante más despacio, quizás sea algo psicológico, pero la realidad es que te va frenando.

En la etapa de hoy hemos atravesado sólo un par de pueblos, mejor dicho los hemos dejado a un lado del camino, Frollais y Aguiada.

Pasadas las una del mediodía llegábamos a Sarria, tras 21 kilómetros; nos acomodábamos en el Albergue, ducha, repaso de cremas, pomadas, ungüentos en los doloridos músculos y a comer. Después una buena siesta y paseo por la zona vieja del pueblo, que en realidad no tiene mucho: un par de iglesias (una de ellas cerrada) y una antigua fortaleza que está en ruinas y a la que no hemos podido ni entrar; después más de lo mismo: planificación para el día siguiente, si estamos optimistas hasta Gonzar y si nos ponemos pesimistas hasta Portomarín; la mañana nos dirá donde quedamos.

Ahora miraré un par de albegues en los dos pueblos, porque ya empieza a haber problemas de alojamiento: cada vez hay más peregrinos, que inician su Camino al acercarse a Santiago.

Buenas noches

PD. Ya hemos cubierto prácticamente dos terceras partes de nuestro recorrido. Gracias por recordármelo Juana

jueves, 16 de julio de 2009

Foto etapa 6a

Etapa 6. Laguna de Castilla - Tricastela

De nuevo volvimos a comenzar nuestra nueva etapa a las 6 de la mañana. La noche anterior nos advirtieron de que haría frío y nos abrigamos para poder sobrellevarlo, pero por una vez no acertaron.

El amanecer fué estupendo, no hacía frío y la temperatura era muy agradable.

Conforme van avanzando los días y nos desplazamos hacia el Oeste es inevitable que vaya amaneciendo cada vez más tarde.

Después de estirar un poquito los músculos de las piernas nos pusimos nuestras linternas en la cabeza y comenzamos el ascenso a Cebreiro. Lo habíamos hecho la tarde anterior dando un paseo, pero esta vez fué más agradable; las piernas estaban descansadas y no hacía el calor del día anterior.

Rápidamente atravesamos Cebreiro y comenzamos un verdadero rompepiernas como dicen los ciclistas, contínuas subidas y bajadas hasta que coronamos el alto de Poio, dejando atrás Liñares.

Conforme nos acercamos a Santiago hay cada vez más peregrinos; es un contínuo adelantar y que adelanten con el consabido "Buen Camino".

Llegando a Fonfría el hambre iba apretando y necesitábamos recuperar fuerzas, con lo que paramos en un bar para poder desayunar.

Todas las mañanas tenemos un ritual que repetimos ya a modo de costumbre desde el primer día; despertador a las 5:30 horas, salida hacia las 6:00, barritas energéticas ó fruta a las 8:00 de la mañana y desayuno hacia las 10:00 horas que normalmente es un buen bocadillo regado con hidratos de carbono (cerveza) que nos ayuda hasta llegar a medio día.

Estos días nuestro avance hacia Santiago es más lento que los primeros días, no sólo por el cansancio que vamos acumulando sino por el trazado del mismo; la zona del páramo leones es una inmensa llanura con un firme extraordinario, que te invita a hacer más de 35 kilómetros en 6 ó 7 horas, mientras que desde que comenzamos con las zonas montañosas con sus toboganes y el piso propio de la montaña, en el mismo periodo de tiempo no superamos los 25; estos rompepiernas te destrozan los tobillos y los pies al no ser un firme contínuo sino lleno de rocas, piedras .........

Hacia las 11:30 de la mañana llegamos a Triscatela, aunque habíamos previsto avanzar un poco más hasta Samos pero estas bajadas, que son mucho más duras que las subidas han hecho mella en uno de nuestros compañeros de Camino y hemos tenido que ir al Centro de Salud para que lo atendieran, con lo que hemos decidido hacer noche en Triscatela y hacer mañana otra etapa cortita para que pueda recuperar bien y no haya consecuencias que ninguno deseamos. Hoy habíamos cubierto 24 kilómetros, más que suficiente

Después de cojer albergue en el Complejo Xacobeo hemos ido a comer, justo cuando estábamos en la terraza para empezar ha comenzado a llover, con lo que nos hemos tenido que resguardar dentro del bar. Después de saciar nuestro apetito hemos vuelto al Albergue para una reparadora siesta que nos ha venido de escándalo a todos.

Por la tarde lo habitual, paseo por el pueblo para ver la iglesia y poco más porque es un pueblo muy pequeño, con lo que rápidamente lo hemos recorrido entero.

Unas compras para la cena en la tienda del pueblo y a escribir un ratito el relato de hoy. Como no tengo conexión con el teléfono móvil hoy no podré subir ninguna foto, pero el próximo día lo haré, para que veáis una de las partes de un albergue ........ el zapatero. SUBIDA

Mañana llegaremos a Sarria sino llueve y tendré algo más que contaros.

Tengo ganas de volver a casa.

miércoles, 15 de julio de 2009

Etapa 5. Villafranca del Bierzo - Laguna de Castilla

Esta mañana volvimos a comenzar la etapa de hoy a las 6 de la mañana; ya nos advirtiron la tarde de antes el frío que por la mañana nos íbamos a encontrar y no les faltó razón; la temperatura era baja, más aún cuando hemos recorrido casi toda la etapa siguiendo el cauce del río.
Los primeros kilómetros los cubrimos rápidamente como los días anteriores, y prácticamente sin darnos cuenta atravesábamos Pereje, trabadelo, Portela, Ambasmestas, Vega de Valcarce y Ruitelón, todos pequeńas aldeas que se desarrollan a lo largo de la antigua N-VI. El piso era muy bueno porque íbamos en un carril asfaltado junto a la carretera, lo que mejora en gran medida el caminar.
Hacia las 9:30 llegábamos a Las Herrerías, donde paramos a desayunar y a reponer fuerzas. Allí nos advirtieron de la dureza del tramo que íbamos a empezar. Una vez repuestas las fuerzas comenzamos la ascensión a O'Cebreiro, aunque ya veníamos subiendo desde la salida de esta mañana pero con rampas más suaves.
A los escasos 1000 metros abandonamos carretera para adentrarnos por medio del bosque, donde el suelo volvió a cambiar para convertirse en camino pedregoso de montaña; en este cruce hemos coincidido con un matronio que iban con sus hijos; dos gemelos un niño y una niña de ocho años, con sus mochilas, sacos y esterillas; iban completos. Nos han contado que hacen etapas cortas de diez a quince kilómetros ....... sencillamente admirable; les hemos dado ánimos y hemos continuado nuestro ascenso.
Las rampas eran durísimas con pendientes considerables: 6 kilómetros sin tregua.
Hacia las 12:30 hemos llegado a la Laguna de Castilla en el límite de León con Lugo . Esttábamos totalmente estenuados tras la subida. Era nuestra parada de hoy porque nos avisaron ayer de la dificultad que íbamos a encontrar para tener cama en el albergue de O'Cebreiro.
Nos hemos duchado y hemos bajado a comer en una terraza que tiene el albergue por donde pasan todos los pergrinos. Nos hemos ido juntando un buen grupo de peregrinos que habíamos decidido hacer nuestra parada aquí.
Al poco tiempo de estar sentados han aparecido los niños a los que hemos recibido con un aplauso, a nosotros nos ha costado esfuerzo subir el puerto, pero se queda en nada con el mérito de estos pequeños, les quedaban sólo 2 kms. hasta O'Cebreiro donde tenían reserva en casa rural, les hemos deseado suerte y han continuado el Camino.
Después de comer hemos ido a descansar un rato, con el propósito de subir a O'Cebreiro por la tarde.
Al levantarnos de la siesta hemos subido al pueblo caminando. El pueblo es el típico de esta zona de Lugo, con sus pallozas, sus casitas de piedra con tejados de pizarra.
El pueblo es un contínuo de tiendas, bares, restaurantes y casas rurales. Su población no debe de superar el centenar de vecinos, pero cada casa una tienda o un bar.
Hemos enredo en la iglesia que está muy ligada al Santo Grial, pequeña y muy bonita. Otro pueblo que parece anclado en otra época, con sus calles empedradas, pallozas y casitas de montaña.
Nos hemos encontrado con otros peregrinos que nos han comentado que se habían quedado sin cama en el albergue y en los hostales y que iban a tener que dormir a la intemperie.
Después de nuestro paseo hemos cenado en el pueblo para poder bajarnos pronto a descansar, porque las piernas empiezan a sentir el paso de los días.
La foto de hoy va para mi hermano Luis, que aparte de cumplir hoy años, ayer nos preguntaba si estábamos siguiendo la ruta de las 5 estrellas: la foto no deja lugar a comentarios; bueno sólo uno: YA HEMOS CUBIERTO LA MITAD DE NUESTRO CAMINO. Cuando salimos de León teníamos 311 kilómetros, desde hoy sólo 154.
Voy a ver si me duermo que el resto de la tropa hace un buen rato que ronca.

martes, 14 de julio de 2009

Etapa 4. Ponferrada - Villafranca del Bierzo

La etapa de hoy ha sido la más corta que hemos hecho hasta ahora 23
kms.

Esta mañana salimos a las 6 acompañados de nuevo de nuestro
compañero japonés Kata.

Hemos tenido que cruzar todo Ponferrada y hasta pasado Fuentes Nuevas
no hemos abandonado las aceras, por lo que se nos ha hecho bastante
más cómodo el Camino.

La etapa ha sido muy llana, con pendientes muy ligeras y entre
viñedos, frutales y rodeados de naturaleza con lo que ha sido
relativamente cómoda.

Al atravesar Camponaraya y adentrarnos en una zona de viñedos hemos
encontrado la señal que acompaña.

Da ánimo y alegría darte cuenta que quedan cada vez menos kilómetros. Nos hemos hecho las fotos de rigor y hemos continuado caminando, hasta llegar a Cacabelos, ha sido cuando hemos empezado a ver hasta donde íbamos a llegar hoy, o atacábamos fuerte o hacíamos la etapa recomendada. A favor estaba el recorte que podíamos dar para mañana, que es otra etapa de subida por monte, con lo que eso plantea; en contra el cansancia de las tres etapas anteriores; Kata tenía claro que continuaría más adelante porque tiene que estar enSantiago antes que nosotros.
Sin darnos cuenta hemos entrado con la charla en Villafranca del Bierzo, pueblo de unos 2500 habitantes, pero realmente bonito. La decisión estaba tomada; nos quedábamos.

Eran las 10 de la mañana y necesitábamos reponer fuerzas, tomamos un bocadillo en la Plaza Mayor y a decidir el Albergue donde nos quedábamos; para eso nos ayudó la chica de la cafetería que nos recomendó el albergue de la Piedra y acertó.

Para ir hacia el albergue tuvimos que atravesar todo el puebo. Impresiona que para lo pequeño que es tenga cinco iglesias, entre ellas una colegiata.

Hemos llegado al albergue y tras una ducha rápida hemos comenzado a hacer un poco de turismo. Estaban todas las iglesias abiertas, al igual que todas las que encontramos por el Camino; podíamos aprender un poquito por el sur e imitarlos, porque es la única manera de poder apreciar lo que tenemos tanto por dentro como por fuera.

Es un pueblo que sin duda merece la pena disfrutarlo.

Después de haber intentado comer pulpo de un pulpeiro ambulante (había acabado con todos los pulpos que llevaba) aunque un grupo de la mesa de al lado al oír que nos quedábamos sin probarlo, amablemente nos han dado unos trozos para probar: delicioso. Ya lo probaremos más adelante.

Después de comer hemos ido a hechar una siestecita para ir recobrando fuerzas.

Mientras que estábamos intentando dormir ha aparecido una señora que daba masajes. Yo estaba y digo que estaba cargado de los gemelos y no podía prácticamente ni doblar las piernas. Que manos tiene Paula: nos ha dejado nuevos; parece que todavía no hemos empezado el Camino.

Teníamos que salir a comprar para la cena y de camino nos hemos acercado a una playa fluvial que tienen, con la ribera del río sembrada de césped, todo limpio: una delicia.

Ya de vuelta al albergue el resto del grupo se ha quedado preparando la cena mientras que yo escribo estas cuatro letras, queremos acostarnos pronto para que mañana estemos en condiciones de subir a O Cebreiro.

Seguimos mañana.

lunes, 13 de julio de 2009

Etapa 3. Rabanal del Camino - Ponferrada



Esta mañana nos hemos vuelto a levantar a las 5:30 para poder comenzar otra etapa, de la que ya nos habían avisado que ibas ser dura, y no porque subíamos a la cota más alta de todo el Camino, sino por la dura bajada.

A las 6:10 horas abandonábamos el albergue de Rabanal del Camino, acompañados de un japonés que se llama Taka (al menos eso es lo que hemos entendido.

Hacía mucho más frío que otras mañanas y hemos que tenido que utilizar ropa de abrigo, la temperatura era bastante baja y además corría viento, con lo que la sensación térmica era aún más acusada.

Comenzamos nuestro ascenso y pasamos por Foncebadón ya con niebla. Foncebadón es una agrupación de 10 ó 15 casas, la mitad de ellas en ruina y con un albergue pequeñito pero que debe de estar muy bien, por la situación y las vistas hacia el valle. Hoy el paisaje era totalmente distinto al del seco Páramo.

Hemos continuado nuestro ascenso buscando Monte de Ferro, que corresponde con la foto que hoy nos ilustra.

La costumbre es la de dejar una piedra a los pies de la cruz y pedir un deseo. Si os fijáis bien todo lo que hay alrededor es un gran montículo de piedra de 2 ó 3 metros de altura.

Yo he dejado una por mí, otra por mi mujer y otra por mi hija y he pedido un deseo también por cada una de ellas.

A partir de ese momento hemos comenzado a bajar y ha sido cuando ha venido lo duro, por un camino de montaña entre rocas de pizarra que se iban clavando en los pies.

A media bajada hemos parado a desayunar en un precioso pueblo que se llama El Acebo, donde en mitad de la calle un paisano estaba ordeñando una cabra, las mujeres se asomaban a los balcones y donde en casa Josefina nos hemos comido un bocata de tortilla de queso con pan de pueblo que nos ha sabido a Gloria.

Una vez repuestas fuerzas hemos seguido el descenso de la misma forma por un sendeo tortoso, por mitad del bosque pero totalmente distinto al de otros días, mucha vegetación, frescor y cantos de pájaros.

Al final del descenso llegado a Molina Seca a unos 8 kms. de Ponderrada, otro pueblo que se quedó en otro siglo, muy bien cuidado y con mucho encanto.

Ya quedaba cerca nuestra meta, o al menos eso creíamos. Desde que sales de Molina empiezas a ver el polígono de Ponferrada pero no llegas nunca, subes, subes, lo ves ahí pero no llegas. Te llevan por un camino que circunvala la ciudad y siempre se te queda a tu derecha y no llegas, paralelo al río y no llegas. Por momentos llega a ser desesperante hasta que comienzas a girar a la deecha atraviesas un pequño pueblo que se llama Campo y ya lo tienes en las manos.

Cruzas un puente para el río y otro para una carretera y ya estás en el Albergue.

Cuando hemos llegado era la hora de abrir el albergue, las 2 de la tarde y es cuando ves la picaresca de la gente. Se notaba perfectamente quien había hecho la etapa a pie y quien en autobús, taxi o haciendo autostop.

Realmente fastidia por sabes que has ido dejando gente atrás que pueden después tener problemas para alojarse, es el único de Ponferrada, aunque después hubo sitio para todos.

Después de una ducha hemos comido y rápidamente a la siesta porque el cuerpo y sobre todo los pies, pedían descanso.

A la tarde lo de siempre, comprar para la cena, charla con otros peregrinos, cena rápida y a la cama que a las diez y media apagan la luz. Yo estoy escribiendo desde la cama , que es todo un lujo habitaciones para 4 personas.

Mañana volvermos al Camino aunque todavía no sabemos en el puebo que terminaremos, todo depende de las fuerzas que tengamos, porque el cansancio ya se va acumulando.

Se me olvidaba, a las 8 de la tarde ha llegado un matrimonio con la hija después de haber recorrido 55 kilómetros ..... anadando era digno de ver la cara de la mujer y después los talones de la hija, le faltaban trozos de piel, una pena.

Os dejo que el sueño me vence y se me cruzan las teclas del teléfono.


Buenas noches


Esta es la foto para ilustrar el mensaje de ayer

domingo, 12 de julio de 2009

Etapa 2. Hospital de Orbigo - Rabanal del Camino.

De duro e inóspito y calificativos que me guardo, ha sido la etapa de hoy.

Nos levantamos a las 5:30 h y después de un aseo rápido y de los preparativos típicos antes del camino, salimos para hacer esta segunda etapa.

Eran las 6:10 h cuando abríamos la puerta del Albergue de San Miguel para comenzar la marcha.

Como el día anterior las primera horas mientras amanecía fueron las mejores, se avanza muy bien y con mucha comodidad.

Hoy al contrario que el día de ayer no nos hemos encontrado en la primera parte del Camino a ningún otro peregrino; puede que pararámos en un punto que no tiene a priori mucho atractivo o que para estar después de León o tiene mucha distancia para una etapa o para hacer dos es demasiado corto, no lo se bien pero en resumen, hasta Astorga nadie.

A Astorga llegamos sobre las 9:00 horas y después de un paseo por la ciudad para ver la Catedral, el Palacio de Gaudí y hacernos unas fotos paramos a la salida para tomar el desayuno, que ya el cuerpo empezaba a inquietarse por el hambre.

Sobre las 10:30 comenzamos la marcha en busca de nuestro destino, al principio teníamos dudas para saber si llegaríamos a Rabanal del Camino o nos quedaríamos directamente en Gonso.

Pero cuando llegamos al Gonso lo tuvimos claro .......... había que hacer un esfuerzo y avanzar otros cuantos kilómetros para llegar a Rabanal. En el Gonso no había nada sólo un bar y el albergue. Eran las 12:30 horas y todavía nos quedaban fuerzas; así que tomamos un refresco en el bar y nos volvimos a calzar las mochilas rumbo a Rabanal.

Si el camino desde Astorga al Gonso era malo, este era peor; nos lo dijo el dueño del bar "habéis pasado lo malo, ahora viene lo peor" y tenía toda la razón.

Esto no es un camino es un arcen al que le han hechado albero u ptra tierra amarilla junto a una carretera de apenas 6 metros (entre los dos carriles) cuando se acabó este tramo, comenzamos otro tramo de tierra roturada directamente sin aplanar ni retirar las piedras más grandes. Cada vez que pisabas una de ellas veías las estrellas literalmente. ...... pero no acabó todo ahí. A unos 3kms de Rabanal entramos por una zona, digamos boscosa. Teníamos que ir esquivando ramas, matojos, raices que sobresalían del camino ........ y todo en una anchura de apenas 80 cm. Nos hemos cruzado con lagartos que ocupaban todo el camino transversalmente. Pero bueno eso es el camino. Hemos logrado llegar a Rabanal sobre las 14:30 horas después de 37 kms.

Mañana nos espera una etapa que no es demasiado larga 32 kms. pero que según nos han contado durante la comida es dificultosa por la subida hasta Cruz de Ferro sino por la bajada hasta Ponferrada; espero que las vejigas nos respeten hasta que acabemos el Camino.

Hoy no hay foto porque no tengo conexión con internet desde el teléfono y lo tengo qu ehacer desde un ordenador que no me permite pasar fotos pero tenía una foto preparada que hice esta mañanaen Astorga, en la que viene la frase que más se repite durante todo el Camino:
"BUEN CAMINO"
Lo dices con el que te cruzas, al que adelantas, el que te adelanta, el paisano de la aldea por la que pasas, el hospitalero cuando entras y cuando sales ......... aquí no hay buenos días, buenas tardes o buenas noches; simplemente "BUEN CAMINO".

El albergue de hoy es el de Nuestra Señora del Pilar. Los hospitalarios atentos, simpáticos y hospitalarios, como bien su nombre indica. Está más masificado que el de Hospital de Órbigo y hay mucha más gente, pero hemos tenido suerte y nos han metido en otra sala algo más pequeña y con menos peregrinos. Parece ser que la costumbre es ir llenando una sala conforme se llega y cuando esta se ha ocupado por completo abren la siguiente.

Hoy hay algo más de producto nacional pero seguimos siendo minoría.

No se si esta noche podré escribir algo más pero si no puedo mañana lo haré desde Ponferrada.

BUEN CAMINO

sábado, 11 de julio de 2009

Etapa 1. 2a parte - La credencial

Este documento que todo peregrino lleva hasta en la ducha, es el que
certifica de alguna manera mediante los sellos que te van poniendo en
bares, en restaurantes, en tiendas de comestibles , en albergues
incluso en las iglesias, que creo que debería de ser el sitio junto a
los albergues donde se sellara, pero es una apreciación muy personal.

Es el reclamo comercial para el peregrino.

Esta tarde la hospitalera del albergue de San Miguel nos comentaba
algunas anécdotas de "peregrinos". La que más me ha impresionado ha
sido la que practican fundamentalmente los extranjeros , que por otra
parte aquí son mayoría, además por goleada entre alemanes,
franceses, canadienses y como no japoneses, somos una autentica
minoría. Sin ir más lejos en el albergue estamos 7 españoles y unos
30 extranjeros. Bueno a lo que iba que me voy por mis cerros. Algunos
de nuestros visitantes hacen las etapas en autobús, pero eso si, la
credencial con todos sus sellos puestecitos para que le den "la
Compostela". Creo que el CAMINO es otra cosa, todavía no se lo que en
realidad, pero eso seguro que no.

Bueno, dejemos a parte ese tema. Esta tarde hemos cenado en el
albergue con lo que hemos comprado en una tienda cercana. Los últimos
los españoles, porque los guiris estaban cenando a las 7 de la tarde.
Son incapaces de variar sus costumbres, que vamos a hacerles . Aunque
quizás tengan razón porque a las 10 de la noche cierran las puertas y
ruegan silencio. Vamos que nos quedan 20 minutos para que esto se
acabe y nos manden a la cama.

Mañana nos espera un buen tirón desde Hospital de Orbigo a
Ganso ..... aunque nos gustaría llegar a Rabanal del Camino pero eso
serían 38 kms. .........

Bueno pues aquí está mi credencial con sellos de distintos sitios.

Nos vamos a descansar. Hasta mañana

Pd.: a Santiago no se llega . A Santiago se va

ETAPA 1 León. - Hospital de Órbigo

Hoy ha sido nuestro primer día del camino. Salimos de León a las 6:10
casi amaneciendo.

La primera parte ha sido bastante buena, hacía fresquito y hemos
podido avanzar con mucha facilidad.

A las 10:00 hemos llegado a Villadánganos del Páramo donde hemos
parado a desayunar y a que nos sellaran la credencial.

Después hemos tenido una media hora más o menos buena donde hemos
avanzado a buen ritmo, pero a partir de las 11:00 la cosa se ha puesto
más complicada.

El sol ha empezado a castigarnos y empezabamos a tener ganas de llegar
al final de la etapa que nos habíamos propuesto anoche Hospital de
Orbigo.

A las 12 del medio día atravesábamos el puente que lleva al pueblo,
después de 6 horas y unos 34 kms.

Hemos decidido que lo mejor era ir al albergue de San Miguel, en el
que nos han recibido con un vaso de vino de la tierra.

Una vez selladas las credenciales y dejado las mochilas en las
literas, una ducha, media hora de descanso y a comer un menú del
peregrino.

Vuelta al albergue y a escribir lo que estáis leyendo.

Ahora una siesta reconfortante y esta tarde un paseo por el pueblo.

......contnuará

viernes, 10 de julio de 2009

Prologo 2. León

23:10h. Ya estamos de vuelta en el hotel después de haber pasado una
tarde por León.

Lo primero fué entregar el coche a la empresa de alquiler y dar una
vuelta por la Iglesia de San Marcos y el Parador, estos tíos supieron
buscar los mejores sitios de cada ciudad, impresionante el claustro y
las piezas que allí exponen.

Como ya se estaba haciendo tarde y teníamos que recoger la credencial
nos marchamos rápidamente al albergue que tienen en León la
Asociación de los Amigos del Camino.

Nos trataron de forma cariñosa y dandonos buenos consejos un
matrimonio de voluntarios, nos enseñaron el albergue y .....… la
verdad una cosa es leerlo y otra muy distinta verlo.

Dos grandes salas llenas de literas, en un pasillo de acceso 50 ó 60
pares de zapatillas, pero bueno sabíamos a lo que veníamos. Una vez
rellena la credencial y con nuestro primer sello, dejamos la plaza de
Santa María del Camino para ver la Catedral.

Sigue siendo impresionante, quizás por no estar acostumbrados a ese
estilo, o sencillamente por que lo es.

Después un paseo por la plaza mayor y a cenar al barrio húmedo. Creo
que en el mismo sitio que cené hace muchos años pero con distinta
compañía. Unas cervezas, un poquito de cecina y queso y mucha charla
de lo que haremos mañana.

Taxi y al hotel que está en el rabo del León.

La foto que acompaña el texto será la imagen más repetida de todos
estos días (eso espero)

Hasta mañana

Prólogo 1. Ya estamos en León

Ya hemos llegado al punto de inicio. Después de 670 kms. desde Úbeda
llegamos a León.

Tras una "ligera" comida a base de cecina y rabo de buey guisado en la
zona húmeda hemos dado un paseo por la zona de la catedral. No hemos
entrado porque la veremos esta tarde más despacio.

Volvemos al hotel, que por cierto está justo en la cola del León,
para descansar un rato y escribir el prólogo del Camino. Esta tarde
volveremos para visitar la catedral y recoger la credencial del camino.

Nos leemos

Pd.: Dejad algún comentario de ánimo

viernes, 3 de julio de 2009

03 de julio 2009


03 de julio 2009, originalmente cargada por juan moreno cobo.

DIA 184 . CERRADO POR DERRIBO.

Este bálsamo no cura cicatrices,
esta rumbita no sabe enamorar,
este rosario de cuentas infelices
calla más de lo que dice
pero dice la verdad.
Este almacén de sábanas que no arden,
este teléfono sin contestador,
la llamaré mañana, hoy se me hizo tarde,
esta forma tan cobarde
de no decirnos que no.
Este contigo, este sin ti tan amargo,
este reloj de arena del arenal,
esta huelga de besos, este letargo,
estos pantalones largos
para el viejo Peter Pan.
Esta cómoda sin braguitas de Zara,
el tour del Soho desde un rojo autobús,
estos ojos que no miden ni comparan
ni se olvidan de tu cara
ni se acuerdan de tu cruz.
No abuses de mi inspiración,
no acuses a mi corazón
tan maltrecho y ajado
que está cerrado por derribo.
Por las arrugas de mi voz
se filtra la desolación
de saber que estos son
los últimos versos que te escribo,
para decir "condios" a los dos nos sobran los motivos.
Esta paya tan lejos de su gitano,
este penal del Puerto sin vis a vis,
esta guerra civil, este mano a mano,
estos moros y cristianos,
este muro de Berlín.
Este virus que no muere ni nos mata,
esta amnesia en el cielo del paladar,
la limusina del polvo por Manhattan,
el invierno en Mar del Plata,
los versos del Capitán.
Este hacerse mayor sin delicadeza,
esta espalda mojada de moscatel,
este valle de fábricas de tristeza,
esta espuma de certeza,
esta colmena sin miel.
Este borrón de sangre y de tinta china,
este baño sin rimmel ni nembutal,
estos huesos que vuelven de la oficina,
dentro de una gabardina
con manchas de soledad.
No abuses de mi inspiración,
no acuses a mi corazón
tan maltrecho y ajado
que está cerrado por derribo.
Por las arrugas de mi voz
se filtra la desolación
de saber que estos son
los últimos versos que te escribo,
para decir "condios" a los dos nos sobran los motivos.

miércoles, 1 de julio de 2009